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miércoles, 25 de septiembre de 2013

Costumbres de las familias mayas de Guatemala




Edwin Rolando García Caal

En Guatemala, las costumbres de las familias mayas se han convertido en un atractivo turístico, sin embargo para la población, dichas costumbres representan su identidad, independientemente de quien les observe. En tanto, otras familias han cambiado estas costumbres por un estilo de vida más urbano, muchas otras luchan por defenderse de la enculturación. No pretendo acotar el tema ya que es de sumo extenso, pero quiero hacer un pequeño aporte, como punto inicial de una reflexión.

En primer lugar es necesario saber que a la llegada de los españoles existían 29 idiomas mayas en Guatemala, ahora sólo se hablan 20 además del garífuna, xinca y español. Las costumbres anscestrales están inmersas en su forma de vida, en la manera en que realizan sus actividades productivas, su idioma y sus creencias religiosas.  Aunque algunos autores señalan que la invasión española provocó la pérdida de identidad cultural hoy por hoy, 6 millones de habitantes indígenas de Guatemala luchan por establecer con mecanismos impresos y educativos sus costumbres y tradiciones.

Una primera costumbre familiar es el hecho de que las mujeres se dediquen a tejer las prendas de vestir de la familia. Los hombres se dedicarán a las actividades productivas, principalmente la agricultura. Madres e hijas trabajan en telares familiares, las telas típicas que son características de cada grupo maya. Los padres y los hijos desarrollan actividades agrícolas y cuando el tiempo se los permite, elaboran sus propias artesanías hogareñas (platos, vasos, comales, canastos, paletas para la molienda, piedras de moler y muebles. Para todas estas producciones artesanales utilizan los insumos rudimentarios que encuentran en la naturaleza, no se realizan transacciones de compra-venta de los insumos para la fabricación de sus artesanías. Utilizan la menor cantidad de dinero que les es posible, ya que su producción agrícola es para el autoconsumo y no para la venta.

Los hijos e hijas acompañarán a padre y madre en la realización de las actividades diarias a partir de los 7 años. Para las culturas mayas, la tradición se transmite de forma oral. Esta costumbre ha venido a ser un muro difícil de vencer por las culturas occidentales que intentan reducir el índice de analfabetismo y enviar a los niños a la escuela a partir de los 7 años. El reproche que los grupos mayas tienen al respecto deriva en que no aceptan del todo una educación que sólo se imparte en español y que no incluye la valoración de sus costumbres. Los niños que asisten a la escuela y aprenden a hablar el español, después quieren trabajar para devengar un salario, mientras que los padres mayas intentan mostrarles la no necesidad del dinero.

Los días para una familia maya son importantes. Para estas familias hay dos estaciones, una seca y una lluviosa. La época lluviosa es importante porque durante ese periodo se dedicarán a la agricultura, la época seca será importante porque en ese periodo se dedicarán a las artesanías y a las actividades religiosas. Sus actividades religiosas incluyen la fabricación de marimbas y la interpretación de este instrumento, ya que será el principal a utilizar en sus festejos religiosos.

Las familias que se han urbanizado, a pesar de mantener el traje típico ya no aprenden a tocar la marimba y gustan de otros tipos de música, dependientes de la electricidad y del carbón. Lo que los obliga a comprar grabadoras, reproductores de cd y otros aparatos electrónicos o de baterías. También se reducen en las familias modernas los deseos de trabajar agricultura de autoconsumo.

Los principales productos de autoconsumo para las familias mayas son el frijol, el arroz y el maíz. Las verduras sí se producen para la venta, ya que con ese dinero compran azúcar, fósforos, sal, fertilizantes, ropa y otros insumos necesarios para su producción de autoconsumo y su alimentación básica. Para vender las verduras utilizan un día de mercado a la semana. Cada pueblo tiene un día de mercado en donde se reúnen todas las familias mayas y ponen a disposición sus productos. En algunos pueblos el día de mercado es el lunes, en otros el martes, en otros el miércoles y así, para los más modernos y occidentalizados los días de mercado serán los sábados y domingos, pero esto ya tiene una influencia de la educación occidental y es más repetitivo en las zonas urbanas. En las familias mayas es la mujer la responsable de llevar las verduras al mercado, el hombre se queda en la finca realizando las actividades de cosecha y almacenando la producción agrícola. Los productos que llevan al mercado las mujeres no son muchos, dependen de lo que quepa en un canasto que llevarán en la cabeza. Incluye la producción de especias para dar sabor a la comida.

Los tejidos son importantes para las familias mayas porque utilizan las telas como un pizarrón para enseñar a los hijos parte de sus costumbres, utilizando en lugar de palabras dibujos y formas especiales. Cada forma bordada en un traje típico representa un mensaje de su cultura para las nuevas generaciones y lo van explicando cuando están tejiendo. Los hijos escuchan con atención. Esta forma de transmitir sus costumbres por medio de la iconografía fue inventada durante la época colonial, ya que los españoles les tenían terminantemente prohibido reproducir sus costumbres por cualquier medio, así como hacer reuniones públicas o secretas, por lo tanto, aprovechando que no comprendían el idioma maya, los indígenas se idearon la forma de utilizar los tejidos como libros para no perder su cultura.

Otra forma de mantener su cultura lo hacen a través de la religión cristiana católica. Aunque no es un catolicismo puro ya que mezclaron parte de sus creencias y las disfrazaron de  celebración católica con el fin de no perder sus creencias. Sin embargo, las nuevas generaciones cada vez más están siendo trasladados del catolicismo al protestantismo y donde sí están perdiendo totalmente sus costumbres.

Sin embargo, no todas las costumbres mayas han sido desechadas por los estudios científicos. Por ejemplo, la forma de tener a los hijos es a través de un parto de pie, en tanto que la cultura occidental siempre propuso el parto en cama. Ahora, estudios recientes han demostrado que el parto de pie (ahora llamado parto vertical), reduce considerablemente las muertes maternas y que los indígenas mayas habían aventajado a la medicina occidental al evitar los partos en cama.

Asimismo, para curar las enfermedades las familias emplean sólo productos de la naturaleza. A veces recurren a ceremonias religiosas curativas en donde queman incienso y utilizan plantas llamadas chilca y ruda. Está documentado que en el Hospital de Huehuetenango la psicóloga dio como caso incurable la locura de una paciente que fue sometida a terapia durante 3 años sin lograr ninguna mejoría. El sacerdote maya, líder de las ceremonias religiosas que se realizan para pedir al corazón del cielo  (el sol) y al corazón de la tierra (la naturaleza) por las cosechas y la salud, llamó a la paciente y la comunidad realizó una ceremonia de curación. Para asombro de la psicóloga, que estaba presente como observadora, la paciente sanó por completo. Ahora, se ha creado en el Ministerio de Salud una unidad llamada de Medicina maya y de otros pueblos no occidentales, para poder avanzar en el conocimiento de la cultura maya en materia de salud. Las familias mayas prefieren acudir antes del centro de salud a la casa de la comadrona, quien ahora ya está certificada por el Ministerio de Salud y recibe una remuneración. Antes era un trabajo gratuito que se hacía por vocación.

Los casamientos en las familias mayas se hacen por solicitud a la familia. El posible novio habla con el padre de la posible novia y negocia una dote (aportación) para la familia, la dote puede consistir en 10 quintales de maíz, frijol o leña; lo entrega al padre y le explica que está con eso solicitando permiso para ser el novio de su hija. El padre toma la dote y analiza, tres días después debe dar respuesta. Si devuelve la dote significa que no está de acuerdo. Si la acepta, ya son novios, pero todas las veces que se reúnan deben estar bajo observación de la familia de la novia. Las familias que están perdiendo estas costumbres ahora no participan del noviazgo de los hijos, ellos consiguen sus novias sin que se enteren los padres. Esto ha traído un problema que no existía antes. En las familias mayas no había madres solteras, porque cuando se quería procrear hijos era condición no negociable estar casados. Las familias consentían el matrimonio en una cena y el matrimonio sucedía en una ceremonia religiosa en donde el regalo para los novios era salir casados hacia una casa construida por ambas familias para que iniciaran su nuevo hogar, la novia debía tener como mínimo 15 años. En las familias que están viviendo en zonas cada vez más urbanas, las hijas resultan embarazadas y los responsables de ese embarazo muchas veces huyen del lugar y emigran hacia la ciudad, dejando tras de sí un creciente número de madres solteras.

La asimilación cultural occidental fue bloqueada por mucho tiempo en la cultura indígena, con apoyo de la marginación que estos pueblos sufrieron de los mestizos. En dichos pueblos mayas no se ponían escuelas, centros de salud, alcaldías y servicios de urbanización. En ese sentido, los pueblos tenían inclusive su propio sistema de justicia. Cuando un miembro de la comunidad era sorprendido robando o cometiendo alguna fechoría, era llevado al centro de la comunidad y azotado por cada uno de los padres de familia, empezando por el propio padre del ladrón; el azotado era amarrado a un palo para sufrir la vergüenza social de haber sido encontrado en infracción. Esto hacía que todo el pueblo lo identificara y por lo tanto le fuera difícil nuevamente cometer una fechoría. Ahora que se han puesto juzgados en todos los pueblos mayas y la educación ha entrado con escuelas y proyectos de educación bilingüe, se ha encontrado que la aplicación de justicia se hace en privado y cuando los criminales salen, pueden hacer nuevamente fechorías debido a que no se reconoce públicamente su delito. Cuando en una familia un hijo cometía un mismo delito varias veces era expulsado de la comunidad, en una sentencia que se hacía en la plaza pública. En las comunidades mayas, no existían las cárceles.

Como parte de las costumbres mayas, es necesario conservar los recursos naturales. Los bosques de Chimaltenango son famosos por estar en territorio maya. Esos bosques se han mantenido por muchos años y no tienen problemas de deforestación. Las familias saben que pueden aprovechar la leña de los árboles secos, pero que no pueden cortar un árbol sano. Las tierras son comunales, por lo tanto no se pueden vender sin el consentimiento de todo el pueblo. Como no hay propiedad privada no prevalecen los intereses de algunos pocos y las decisiones deben ser tomadas por toda la comunidad. Cuando los gobiernos de Guatemala de 1956 a 1986 estuvieron dando títulos de propiedad a las familias de algunas comunidades mayas, resultó que los más adinerados agricultores de la Costa Sur (la mayoría de origen español o capitalistas) llegaron con estas familias y les compraron sus títulos de propiedad para poner producción vía farmer para las exportaciones, lo que terminó por desintegrar las comunidades indígenas y convertirlas en zonas urbanas con costumbres occidentales.

Las familias mayas tienen un repertorio grande de alimentos especiales. Como parte de su producción de autoconsumo, en todas las familias hay gallinas, gallos, patos, chuntos, perros y gatos. Con excepción de los dos últimos que son mascotas, el resto se utiliza para cocinar. El caldo de chunto o kac kic  es un plato reconocido a nivel mundial como una exquisitez maya. También hay saquic o caldo blanco, tamales,  chuchitos, atol blanco, café de tortilla quemada, tamalitos de chipilín, tamalitos de elote, atol de elote, atol de arroz, fresco de arroz, atol de arroz con maíz, elotes azados, pan de elote, el café es hervido y las tortillas tienen diferentes tamaños y grosores.

Así como los alimentos, el embarazo y posterior nacimiento en las familias indígenas está acompañado de un sinfín de costumbres entre las que podemos mencionar:

La señora no debe levantar cosas pesadas, no debe participar en bailes de convites porque el niño puede nacer con un defecto físico. No es recomendable pasar sobre escobas, si no la mujer sólo puede llegar a tener hijas mujeres. No debe de lavar ropa por que le hace mal al niño. No es recomendable pasar sobre mangueras para que el cordón umbilical no esté enrollado al cuello, es recomendable bañarse con agua caliente y con toda clase de hiervas  (palogigante, hojas de cerezo, durazno, manzana, chilca, altamiz, bugambilia, culantrio, etc., para que tanto el niño como la madre, en el transcurso del embarazo y después del nacimiento no se enferme constantemente.

Cuando la mujer está embarazada no es recomendable que haga tamalitos en tusa de color rojo para que el niño no sea tímido. La señora embarazada debe de consumir aguacate con sal para que el niño sea inteligente. La madre debe consumir el alimento una sola vez no recalentado para que el recién nacido sea muy listo. La mujer embarazada debe cargar siempre su delantal para que el niño no sea muy liberal. Evitar los enojos, tensiones, discusiones, porque puede percibirlo el niño. La mamá debe escuchar música y participar en las fiestas para que el niño sea muy activo.

Después del nacimiento es necesario quemar la placenta para que sea muy listo. Hacer un agujero en medio de una tortilla recién salida al comal luego hablarle al niño o niña para que le facilite hablar. Hablarle con objetos que tengan colores muy encendidos para que sea muy listo. Cuando al retoño de la corteza del pino esta cae dejando un agujero al caer, hablarles a los niños por el agujero para que lo imiten y logren iniciar el habla. Destaparle la cara en el momento que nace el niño para que pueda ver rápidamente. Colocarle clara de huevo en las plantas de los pies para que logre caminar rápidamente. Cuando sale el sol caminarlo sobre mazorcas con los colores de los 4 puntos cardinales (Rojo, Negro, Amarillo y Blanco) así se aumenta su sentido de locomoción y visual. Bañar al recién nacido con agua caliente, hojas de durazno, chilca, y con rosas tendrá mejor energía para el transcurso de su desarrollo. El recién nacido debe utilizar un anillo de oro o cadena para protegerlo del mal de ojo. Se debe buscar un amuleto para protegerlos de malos espíritus. Se debe halar la mollera por la cabeza cuando un niño tiene dificultad respiratoria, por eso se pone de cabeza y se sacude tomándolo por los pies. No cortarle el cabello antes de cumplir el año para evitar que se enferme constantemente y que tenga un desarrollo inadecuado. Amarrar las manos del niño cuando nazca parea que no sea inquieto y tentón. Dar los restos de comida del niño a un loro para que hable más rápido. Vestir al niño de color rojo para protegerlo de mal de ojo. Se coloca un morralito en el cuello  del niño para que las mujeres embarazadas no le den mal de ojo. Se le coloca chile, ruda y ajo, en la ropa para protegerlo de malos espíritus. Ponerlo de cabeza cuando hay relámpagos para que no se asuste. No es bueno cortarle las uñas antes de un año  si no al llegar a grande no tendrá muchos bienes.

En la cultura occidental, cada vez que un niño o una niña se enferma, los médicos acostumbran recetarle antibióticos, lo que le provoca temprano enfermedades del estomago en la flora intestinal y gastritis, al mismo tiempo que reduce sus defensas.

Bueno, costumbres hay más, pero el tiempo para escribir en este apartado se terminó, así que será hasta una próxima.

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